domingo, 29 de julio de 2012

Una de tantas.

Entre tanto humo de este cigarro que me esta matando por dentro,te escribo con una sonrisa irónica y el carmín desgastado del licor del 86 en mi otra mano.
Vaya,como ha pasado el tiempo ¿No?.Hace nada estábamos en aquel bar de mala muerte compartiendo lo que iba a ser nuestro último café,recuerdo que sonaba música en vinilo de aquel cacharro que hasta hoy sigue funcionando,no se ha marchitado con el paso del tiempo,que pena que no todos podamos decir lo mismo.
Conservo aquella servilleta con unos números casi borrados y maltratados por el paso del tiempo.Te prometí que te llamaría,ingenuo...No se como no has oído hablar de leyendas que cuentan que no te debes fiar de la gente que conoces en las gasolineras,incluso teníamos planes de futuro.¿Pero que pasa?,pasa que al final todo se picia,que esa chaqueta de cuero recién estrenada no era más que una vulgar apariencia,que en realidad seduces con tus labios rojos como dos rosas que no se marchitan nunca y piensas que nada saldrá mal.Salió mal.
Supongo que me elegiste ami entre la multitud por que pensabas que me vale cualquier asiento trasero y unas buenas vistas hacia el amanecer,lo siento,estoy cansada de gastar rímel y botes de carmín para principitos de gasolinera y macarras de cuero,esta vez mis tacones se van alejando con un "Ya te llamaré,pronto" y una sonrisa estropeada por el paso del tiempo.